«3 cosas que no volvería a hacer en mi próxima startup (y 4 que sí haría)»

Ex-CEO de Mention, una plataforma de monitorización web, Matthieu Vaxelaire vendió su startup a un grupo de relaciones de prensa sueco en agosto de 2018. Esto es lo que él extrae de sus 5 años de experiencia al mando de la empresa:

Mientras exploro nuevas ideas para una startup, me he tomado el tiempo de reflexionar qué tipo de empresa quiero crear. Estas son mis anotaciones.

3 cosas que no haría

#1 Comprometerme con la visión de la empresa: Cuando era CEO, no tenía una visión fuerte acerca de lo que me gustaría hacer de la empresa. Esto no es una condición sine qua non para crear una startup con éxito, pero comprometerte con una visión y unos objetivos a largo plazo puede hacer que el desarrollo sea más difícil. Mi equipo me daba constantemente su opinión acerca de esto y tenían razón. Tener una visión clara te ayuda a atraer buenas personas, dispuestas a participar en la totalidad del proyecto, incluso cuando los tiempos son difíciles, que es más o menos el día a día de una startup.

#2 No comunicar los salarios ni la composición del accionariado: Como todos los CEO de startups, era transparente en lo que se refiere a las cifras y los informes de cuentas; sin embargo, había otras cuestiones que no compartía, como la cantidad de efectivo en nuestra cuenta, la composición del accionariado y los salarios. No era una decisión sobre la que hubiera reflexionado, era más bien una costumbre que no conseguí aplicar. Pensé en ponerle solución, pero nunca llegué a hacerlo. Tenía (demasiado) miedo de las posibles reacciones.

#3 Esperar demasiado tiempo antes de contratar un Talent Manager: Contratar un Talent Manager cuando ya éramos 20 empleados tuvo verdaderamente un impacto positivo en la empresa y sobre mí personalmente. Contar con alguien concentrado en encontrar a los mejores candidatos, motivarlos para crear un equipo integrado e inculcarles nuestros métodos de trabajo lo cambió todo. Esto no nos ayudó sólo a atraer a los mejores, sino que también me ha permitido concentrarme en el desarrollo de la empresa. La próxima vez, contrataré un Talent Manager a partir de los 10 empleados, puede que incluso a partir de los 5.

4 cosas que volvería a hacer sin dudar

#1 Culture fit > Hard skills: Es fácil emocionarse por un candidato que ya ha tenido resultados notables en un puesto similar, esto te tranquiliza y parece que es menos arriesgado. Pero hay una cosa más importante: «culture fit». Las habilidades técnicas son, por supuesto, más concretas pero la adecuación es crucial para el ADN de la empresa. La «culture fit» siempre será más importante que el CV o las hard skills.

#2 Ser apañado: He aprendido muy rápido durante mi recorrido como emprendedor que es más fácil gastar dinero que ganarlo. Esto parece evidente pero, en un mundo donde el capital de riesgo circula a montones, resulta tentador conseguir dinero y después gastarlo, una y otra vez. Quemar el dinero puede llegar a ser una adicción rápidamente. De verdad creo que podemos hacer mucho poco a poco (por eso reinventamos FedEx y UPS muy pronto). Prefiero ganar siendo ahorrador e inteligente, antes que gracias al dinero.

#3 Un retiro anual: Un retiro anual es una inversión considerable de tiempo y dinero, así que tenía miedo de organizar el primero. Pero rápidamente me he dado cuenta que este es el momento perfecto para reflexionar sobre el pasado, el presente y el futuro de la empresa. Es una manera excelente de pensar sobre: que hemos conseguido a lo largo de los últimos 12 meses; quiénes somos a día de hoy, nuestros valores y nuestra visión de quiénes queremos ser; dónde nos vemos dentro de 12 meses y cómo queremos llegar ahí. Un retiro es también una oportunidad de unir al equipo en un entorno que no sea el del trabajo, sin ordenadores. Este tipo de convivencias son indispensables para construir amistades y reforzar los valores de la empresa, incluso para una startup que está en su fase inicial. Todavía no sé dónde será mi próximo retiro, pero la montaña o una isla están al principio de mi lista.

#4 Una ambición internacional desde el primer día: El mundo ha llegado a ser un pueblo, todo lo que hacemos puede tener un impacto global. Quiero que todo lo que hagamos refleje esa ambición internacional desde el primer día. Esto implica construir una empresa que adopte el inglés, con un equipo internacional y diverso y un conjunto de valores internacionales.

Una última cuestión para terminar, acerca de un tema sobre el que no estoy seguro… el trabajo a distancia. Sí, estamos en 2019. Sí, puede ser contra productivo tener una hora de trayecto todos los días para ir al trabajo. Y sí, el mundo está repleto de talentos. Pero para mí, una startup es pasar tiempo con personas inteligentes, construir cosas increíbles mientras nos divertimos. Esto es difícil cuando la gente no está físicamente. Trabajar codo con codo no es sólo la clave para construir una empresa de éxito, en mi opinión es también la manera de fomentar la innovación. Pero puede ser que yo sea de la vieja escuela y me haga falta modernizarme.

Fuente: Le Soir