El gigante francés de supermercados Carrefour considera salir de Bélgica
El gigante francés de supermercados Carrefour está revisando sus operaciones en Bélgica, lo que podría llevar a la venta de su división belga.
La decisión se produce tras años de pérdidas financieras, y Bélgica ya no se considera un mercado prioritario para la empresa.
Carrefour anunció recientemente sus planes de centrarse en tres mercados clave: Francia, España y Brasil. Cabe destacar la ausencia de Bélgica en la comunicación, lo que indica una posible desinversión, ya que la compañía busca salir de países no prioritarios.
Este desarrollo tiene implicaciones importantes, ya que Carrefour es la tercera cadena de supermercados más grande de Bélgica, detrás de Colruyt Group y Delhaize.
Su presencia incluye 40 grandes hipermercados, 440 supermercados Carrefour Market y 300 tiendas de conveniencia Carrefour Express.
La mayoría de estos establecimientos, a excepción de los hipermercados y 43 supermercados, son operados por franquiciados independientes. En todo el país, Carrefour emplea a 10.000 personas.
Carrefour ha enfrentado desafíos en Bélgica durante años. Su facturación anual ha rondado los 4000 millones de euros, incluso en períodos de inflación, lo que implica una disminución del volumen de ventas a pesar del aumento de precios.
La rentabilidad también se ha visto afectada: la división belga registra pérdidas operativas desde 2021. Si bien las pérdidas han disminuido recientemente, la empresa aún registró un déficit de 2,9 millones de euros en 2024.
El secretario sindical de ACV Puls, Wouter Parmentier, reaccionó a la noticia diciendo que la posible venta no es inesperada, citando similitudes con la situación en Italia.
En ambos países, Carrefour no ha invertido en modernizar sus tiendas, por lo que muchas de ellas han quedado obsoletas y las cifras financieras en Bélgica son poco prometedoras.
Los empleados están muy preocupados, afirma Parmentier. Muchos trabajadores de Carrefour llevan años en la empresa, y una posible venta sería un shock para la fiel plantilla.
A pesar de las preocupaciones, Parmentier cree que habrá suficiente interés en las sucursales belgas de Carrefour por parte de otros minoristas. Enfatiza que los sindicatos seguirán de cerca las negociaciones para salvaguardar los salarios y las condiciones laborales.
Fuente: The Brussels Times
