“¿Mi lección empresarial más importante? Trabajar menos pero trabajar mejor”

“¿Mi lección empresarial más importante? Trabajar menos pero trabajar mejor”

 

Jean-Pol Boone (45 años), afincado en Lieja, trabajó anteriormente en Canal+, Universal Group y Vivendi, y es consejero independiente de la Fundación Rey Balduino, Europal Packaging y AGC Glass Europe. En 2014 vendió su sitio de subastas Outlet-Avenue a la empresa de inversión familiar ShopInvest. A principios de 2016, fundó una escaladora de big data bajo el nombre de Inoopa que es considerada como el Google B2B y en la que aún hoy ocupa el papel de CEO.

¿Qué importancia tiene el dinero para usted?
“El dinero proporciona comodidad, pero para mí no es un fin en sí mismo. Es sobre todo una forma de poder lanzar proyectos que me apasionan, y de ser libre en la medida de lo posible, pero en ningún caso tengo la ambición de convertirme en la persona más rica del cementerio.”

¿Cuál ha sido su mejor inversión hasta ahora?
“Mi mejor inversión fue contratar a un director financiero para mis diez participaciones. Eso ha cambiado mi vida considerablemente: ahora tengo mucho más tiempo para dedicar a los proyectos”.

¿Forma usted parte de la revolución alimentaria? ¿Y su peor inversión?
“La agricultura ecológica es claramente mi peor inversión hasta ahora. Cometí muchos errores porque no conocía el sector. No obstante, creo que las inversiones serán interesantes dada la necesidad de pasar a una economía más resistente en los próximos años. Pero estoy tranquilo al respecto, lo importante es que he hecho algo significativo sin correr demasiados riesgos”.

¿De qué se arrepiente profesionalmente?
“Estoy bastante satisfecho con mi curso. He cometido muchos errores, pero me sigue apasionando el espíritu empresarial. A veces me arrepiento de mis decisiones en cuanto a colaboraciones con otros. Como todo el mundo, he tenido que lidiar con decepciones e incluso traiciones en el pasado”.

¿Qué le quita el sueño?
“Tengo muy buen sueño. A veces me despierto por la noche porque estoy entusiasmada por empezar negocios o porque necesito poner orden en mi cabeza. Cada inversión tiene sus retos y para mí personalmente es importante desarrollar siempre una visión clara”.

¿Qué es lo que más le gusta de la actividad empresarial?
“Gente, gente, gente. Me levanto todas las mañanas con gran placer para trabajar con personas y para proyectos que realmente me motivan”.

¿Qué gran sueño empresarial sigue acariciando?
“Tengo dos grandes sueños empresariales. La primera es llegar a 15 empresas de las que sea accionista en más de un 40% y en las que pueda seguir agudizando mi curiosidad intelectual: 15 participaciones en la innovación y la transición ecológica. El otro sueño es que una de mis inversiones salga a bolsa”.

¿Dónde se ve dentro de 2 o 3 años?
“Esperemos que para entonces siga siendo tan libre como ahora. Si depende de mí, incluso me gustaría llevar una existencia algo más nómada. Tengo una furgoneta camper y todavía quiero viajar mucho con mi familia. Escandinavia y Portugal, por ejemplo, siguen estando en nuestra lista de pendientes.

¿Qué sacrificios tiene que hacer en su vida privada para poder hacer negocios?
“Cada vez me aseguro más de rodearme bien para no vivir para trabajar. Solía estar trabajando todo el tiempo y, cuando lo recuerdo ahora, pienso que es completamente ridículo. Hoy, creo mucho más valor que antes tomando conscientemente cierta distancia. Esto funciona cada vez mejor. Cada vez me aseguro más de rodearme bien para no vivir para trabajar.

¿Tiene otras grandes pasiones además de ser empresario?
“Soy un gran amante de la naturaleza, la agricultura y el running. Paso al menos una hora al día en el bosque. Incluso celebro allí mis entrevistas de trabajo, reuniones y negociaciones. Me resulta muy difícil sentarme en la oficina y más aún detrás de una pantalla de ordenador. Necesito poder moverme, si no, me pongo nervioso”.

¿Cuál es la lección empresarial más importante que ha aprendido en los últimos años?
“La lección más importante para mí es trabajar menos, pero trabajar mejor. Esto requiere una cuidadosa selección de las personas con las que trabajas, para que se complementen perfectamente contigo y con los demás. Eso también me ayuda a centrarme en mis puntos fuertes y a no gastar energía innecesaria en lo que no me gusta. Pero eso requiere confianza en los demás y la capacidad de dejarse llevar.

 

Fuente: Bloovi.be

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