¿Cómo salir de la niebla de los estudios y encontrar un trabajo?

Recibo mis resultados y, después de cinco duros años, por fin me gradúo. Mis primeras emociones son un gran alivio y mucha euforia. Pero unos días después, me empiezo a hacer preguntas: ¿qué hago ahora?; ¿A qué quiero dedicarme?, ¿Qué hay ahí fuera?; ¿Cómo encontraré un trabajo?; ¿Tengo suficientes habilidades para que me contraten?; ¿Cómo lo haré?
Unas semanas más tarde, he salido de la niebla de los estudios y para ayudarte a pasar esta fase con más serenidad, ¡te daré algunos consejos!

1.- Saber más
Algunos saben lo que quieren hacer desde que son niños, a otros la elección de sus estudios les condiciona un poco más hacia una profesión muy precisa y otros todavía no lo tienen claro. Estudios como la ingeniería, la economía, la comunicación o las ciencias sociales dan acceso a muchas profesiones.
No sabía qué dirección tomar, ni siquiera conocía todas las direcciones posibles. Para mí, el primer paso es informarse de todos los caminos que se pueden abrir. Para ello, te aconsejo que:
– Busques en sitios de empleo: las páginas web como Indeed, StepStone, Linkedin o Reference te permiten conocer los diferentes puestos de trabajo que existen. Puedes escribir palabras clave en la barra de búsqueda y a medida que lees, te darás cuenta de los diferentes caminos que existen.
– Conozcas a gente ya empleada: tener su historia y su experiencia te permite tranquilizarte. El primer trabajo no es necesariamente aquel en el que harás toda tu carrera. En segundo lugar, también me abrieron los ojos sobre el funcionamiento de los sistemas de contratación.

2.- Pregúntate a ti mismo
Una vez que entiendas un poco mejor cuáles son los diferentes trabajos, puedes preguntarte cuál te gustaría hacer. Saber lo que no quieres hacer es un primer paso. Pero saber lo que quieres hacer es mucho mejor. A través de las conversaciones que tuve con personas que me inspiran, que me rodean o simplemente haciéndome preguntas, logré tener las cosas más claras. Pude entender cada vez mejor mis deseos, percibir lo que realmente quería hacer como profesión y afinar mis criterios de búsqueda.

3.- Búsqueda a fondo
Una vez que has entendido todos los caminos posibles y te has cuestionado lo suficiente como para conocerte bien, empiezas a buscar realmente un trabajo. Esta vez navegas por las diferentes páginas web de empleo con el objetivo principal de encontrar un trabajo. Los principales son Reference, Indeed, StepStone, …
Estas webs te permiten introducir varios criterios de búsqueda (zona geográfica, sector, palabras clave, etc.) y puedes establecer alarmas en determinadas búsquedas para recibir diariamente correos electrónicos con las vacantes que coincidan con tus criterios.
Y la última que recomiendo es, por supuesto, LinkedIn, la red social profesional por excelencia. A través de ella, puedes compartir contenidos de tu propia experiencia y hacer clic en la pestaña de empleos para encontrar los anuncios que se ajusten a ti.

4.- Véndete
Hay que saber proponerse y sacar de las distintas experiencias el “plus” que te convierte en la persona adecuada para contratar. Este “plus” pueden ser tus trabajos de estudiante, tu participación en asociaciones, tu Erasmus, tu pasión, un rasgo de tu carácter, etc. Son cuestiones que debes destacar en tu currículum y carta de presentación.
Un pequeño consejo: utiliza los términos utilizados en la descripción del puesto para mejorar tu perfil en tu carta de presentación.

5.- No pierdas la esperanza
Por el momento, he enviado unas 15 solicitudes. Sólo 6 han respondido, 2 de ellos positivamente. Cuando digo positivamente, significa simplemente que mi CV ha sido retenido y que paso a la fase de entrevistas. Pero a pesar de este bajo índice de respuestas positivas, no pierdo la esperanza. Es muy importante no tomarse demasiado en serio estas “no respuestas” o rechazos. En la búsqueda de empleo hay que ser persistente, redoblar los esfuerzos y mantener siempre la confianza en uno mismo.
Durante todo el proceso hay que tener paciencia. El primer paso de saber lo que se quiere hacer ya lleva algún tiempo. Ten confianza, no te frustres ante la primera negativa. Encontrarás tu primer trabajo, y si no te convence, encontrarás tu segundo trabajo. Nada está fijado en el tiempo. ¡Buena suerte!

Fuente: KotPlanet.